Soluciones Sencillas, Problemas Complejos

Hace meses elaboré un escrito con éste mismo título, y desde entonces esa frase se convirtió en una de mis favoritas, ya que veo cómo día tras día surgen nuevos trastornos, nuevas patologías, sin embargo la solución a las mismas puede ser sumamente sencilla.

Muchos de los trastornos y condiciones emocionales que padecemos hoy en día son autoinducidos. Nuestro estilo de vida, prioridades, deseo de surgir, todo ello nos ha llevado, sin darnos cuenta, a olvidarnos de cosas tan básicas como lo son la comunicación, la practica de valores,  el relajarnos, vivir con sencillez, meditar; todas actividades que promueven la salud mental y la armoniosa convivencia entre unos y otros.

En lo que respecta a nuestros hijos, vemos que cada día aumentan los problemas de atención y conducta dentro de las aulas.  La falta de sometimiento a la autoridad es común entre los niños y adolescentes, llevando a los maestros a frustrarse cada vez mas y tener que dedicar su tiempo, más que a transmitir conocimientos, a tratar de ver cómo los incentivan a obedecer y terminar sus trabajos en clase. Tenemos niños y jóvenes deprimidos, frustrados y emocionalmente afectados en nuestras aulas. La inversión en servicios de Psicología, Psiquiatría y Paidopsiquitria aumenta impresionantemente. Grandes sumas de dinero deben ahora invertirse en buscar ayuda por parte de algunos de estos profesionales, ya que no logramos hacer que nuestros hijos cumplan con sus deberes y responsabilidades. 

Buscar su ayuda no es malo, sin embargo en la mayoría de los casos, la solución a estos problemas está en el hogar, no en un consultorio.

Una solución sencilla que deseo recomendar en esta oportunidad, y que he visto funcionar con gran efectividad en muchos hogares, es el inculcar en nuestros hijos valores espirituales.  El enseñarles desde niños a conocer, respetar y obedecer los principios Bíblicos, aunado al ejemplo que vean en nosotros los padres, es extremadamente efectivo.  Es el antídoto contra la falta de respeto a la autoridad y otras conductas inapropiadas.  Hago la aclaración, hay casos que requieren de una intervención profesional, pues se trata de condiciones patológicas, o bien nosotros como padres necesitamos de orientación profesional; es justo y necesario en algunos casos, pero esos son los menos.  

Un  hermoso material que les puede servir para este fin y que es totalmente gratuito es la Biblia APP Para Niños. Es una aplicación que pueden descargar en su dispositivo móvil y compartir fácilmente con sus niños.

Seamos sabios, aprovechemos los recursos a nuestro alcance.  ¡Verán que pueden resultar soluciones sencillas a problemas complejos!