¿POR QUÈ ES TAN DIFICIL LOGRAR QUE OBEDEZCAN?

En mi trabajo diario con padres de familia escucho con mucha frecuencia la siguiente pregunta: ¿cómo lograr que nuestros hijos hagan lo que les corresponde? ¿Cómo hacer para que completen o bien inicien sus tareas y responsabilidades?

Pues hay una teoría en psicología llamada "Teorìa de la Autodeterminaciòn", la cual busca explicar cuáles son los factores que impulsan a un individuo a encaminarse hacia el logro de una meta.

Segùn ésta, nuestros hijos se sentirán motivados a actuar y desarrollar actividades dependiendo de cuanta autonomía, competencia y conexión social perciban. La autonomía tiene que ver con la capacidad de decisión que tengan, si se trata de algo sobre lo cual pueden decidir la hora o bien la manera en que pueden presentar la actividad, por dar un ejemplo.

Competencia tiene que ver con cuán capaces se sienten para realizarla, si consideran que tienen el conocimiento o las destrezas necesarias para hacerla.  Y la conexiòn social, está relacionada con el vínculo afectivo que tengan con la persona quien propone la actividad. Si se trata de alguien que les demuestra empatía, afecto, comprensión.

Cuando estos tres componentes están presentes, aumenta considerablemente la posibilidad de que nuestros hijos, sin mayor presión desarrollen sus tareas o asignaciones.

Claro está, no siempre podrán decidir cómo y cuando hacer las cosas, a veces no tendrán todo el conocimiento necesario y la instrucción no siempre vendrá de alguien que les agrade lo suficiente, sin embargo al conocer éstas variables, nosotros los adultos bien podemos presentar la información de una manera diferente, pensando más en ellos que en nosotros.

Por lo regular, al dar una orden, partimos de la premisa de que es importante para ellos, para su desarrollo personal, sin embargo esa es "nuestra" opinión, es "nuestro" punto de vista. Pero cuál es el de ellos? Pensemos un poco en eso y tratemos de partir de alli. Si lo hacemos, veremos que la indicación u orden tendrán un tono diferente.

"Apúrate, porque que tienes que terminar la tarea antes de las 7:00pm. De lo contrario no podrás ver el partido!" no es lo mismo que decir: "oye, si completas la tarea antes de las 7:00pm, tendrás la oportunidad de ver el partido. Dale, anímate y termina!" Una es una orden, la otra denota una opción, tu decides si lo completas antes de la hora o no.

Es importante que tengamos presente que criar no implica "recrear un molde". Nuestros hijos, si bien es cierto poseen nuestros genes, pero no son precisamente igual a nosotros ni tienen por qué ser lo que esperamos de ellos. Tienen autonomía, tienen fortalezas y debilidades y la opción de elegir quién les agrada y quién no. Tengamos eso presente y respetémoslo; de esa manera contribuiremos a su crecimiento y fomentaremos una relaciòn armónica con ellos.